Mini Cooper 5 puertas, manteniendo la esencia pero a la última en tecnología

Sorprendente, deportivo y ágil. Son tres palabras que servirían a la perfección para describir el Mini Cooper. La evolución del mítico compacto británico ha crecido de manera considerable, eso se observa a simple vista. Lejos queda ya ese modelo de los años 60 y 70, ahora nos impresiona con sus prestaciones, sus acabados y su tecnología, eso sí, tratando de mantener la línea del coche lo más fiel posible al diseño original. Y es que en esta ocasión, hemos tenido la posibilidad de probar el Mini Cooper 5 puertas, lo que nos aumenta un poco el tamaño del coche, porque si, necesitamos algo más de espacio para poder meter dos puertas más a nuestro vehículo. No obstante se sigue tratando de un automóvil pequeño del segmento premium, que tiene una tendencia urbana. Aunque ojo, no hay que anclarlo solo en este espacio, ya que se puede comportar como un deportivo y sacarnos más de una sonrisa.

Hay que recordar que estamos hablando del pequeño de la familia y obviamente el Mini Cooper tiene unas dimensiones reducidas. Aclaro que midiendo este periodista más de 1’90, en pocos vehículos compactos me siento con espacio suficiente. Pero sin duda este Mini sorprende porque no es tan mini como dice su nombre. Pero como diría Jack el Destripador, vamos por partes.

Líneas clásicas con algunos cambios

El frontal del Mini Cooper tiene varios elementos que nos hacen identificarlo de manera prácticamente inmediata. En primer lugar esos grandes faros ovalados, una calandra de grandes dimensiones que está dividida en dos (la parte inferior mucho más pequeña) y unos vinilos en forma de franjas que dividen el coche en tres secciones. Sin ninguna duda son elementos que ayudan a que rápidamente y de manera muy sencilla se identifique este modelo. Pero también dotan al coche de ese carácter deportivo y algo agresivo que le caracteriza.

Si nos vamos al lateral se aprecia totalmente esa pintura bitono que tanto caracteriza a los modelos de la marca. En esta ocasión el color principal del Mini Cooper es el Starlight Blue, que combina a la perfección con el negro brillo que lo encontramos de las ventanillas hacia arriba y en los retrovisores. A esto hay que añadir que las llantas en 17” en negro brillo y aluminio le dan el toque clave de elegancia. Un lateral sencillo, con unas curvas muy suaves que hacen que mantenga su esencia.

 «El control de la climatización se realizan mediante ruletas y botones físicos»

La parte posterior del modelo llama la atención por los faros, con la bandera de Reino Unido (dentro del paquete Union Black), son sin duda uno de los elementos que más llama la atención. Decir también que el pequeño alerón que presenta (nada exagerado comparado con el que presentan otros coches del segmento) ayuda a añadir un toque deportivo y de elegancia. Por último en la parte inferior encontramos un difusor (que nos gustaría que mantuviese el negro brillo, pero no hemos tenido suerte) en el que encontramos la cola de escape y la luz antiniebla. ¡Y si amigos, en esta ocasión se trata de un escape de los de verdad!

Si entramos al puesto de conducción, vamos a observar acabados muy buenos, con materiales de alta calidad. En primer lugar unos asientos bastante cómodos, que nos sujetan de una manera perfecta al asiento. Cuenta también con banqueta extensible (los que tenemos piernas largas lo agradecemos y mucho). No obstante, si se echa de menos que no cuente con botones eléctricos para ajustar la posición del asiento (al menos en la unidad probada), es una pijería pero uno se acostumbra rápido a lo bueno. Seguimos con el volante y que volante. Redondo, “gordito” con los botones justo, mi diez lo tienen, un volante idóneo.

En cuanto al cuadro de mandos, encontramos el típico reloj de mini encima del volante que nos marca la velocidad y dentro de él, encontramos un pequeño cuadro digital que nos indica el modo de conducción en el que vamos y la marcha que llevamos. Al lado de este reloj encontramos dos semicírculos más, uno de ellos nos muestra las revoluciones y el otro (esta vez de manera digital) el combustible que nos queda en el depósito.

Pasamos a la consola central y en esta ocasión, encontramos una gran pantalla central en la que tenemos todo el sistema de infoentretenimiento. Esta, se encuentra incrustada dentro de un círculo acabado con un led luminoso que nos da iluminación en prácticamente todo el vehículo y que se agradece en los viajes nocturnos. Contamos también con unos cuantos botones físicos (gracias Mini) para poder controlar la climatización, los sensores de aparcamiento y elegir el modo de conducción. También encontramos aquí el botón de arranque que diferencia del resto al ser de mayor tamaño y de color rojo.

«Sigue manteniendo ese toque que le hizo popular, pero incluye muchas novedades»

A esto hay que añadir que dentro de este Mini Cooper contamos con un equipo de sonido Harmarn/Kardon, que nos permitirá disfrutar con una increíble calidad de nuestras canciones favoritas. Por último decir que este modelo también cuenta con techo abatible. En las plazas traseras se echa de menos contar con salidas de ventilación y poder contar con alguna toma para cargar el móvil. Aun así son cómodas y espaciosas. El maletero de 278 litros de capacidad y con doble fondo no es de los más grandes, aunque si abatimos los asientos ganaremos bastante capacidad. De todas formas hay que decir que aunque no sea excesivamente grande, hay hueco de sobra para meter el equipaje en caso de que queramos hacer una escapada.

Esconde 136 cv bajo el capó y tiene tecnología Twin Turbo

Pasemos ahora al corazón del Mini Cooper. Nos encontramos ante un motor de 1,5 litros, que desarrolla 136 cv de potencia. Más que suficiente para movernos por entornos urbanos y poder realizar viajes y escapadas sin notar que nos falta potencia. Es un coche que responde muy bien, incluso cuando está en bajas revoluciones, la tecnología Twin Turbo que lleva este modelo le ayuda a ello.

«Tiene un motor silencioso pero que nos da la oportunidad de divertirnos y disfrutar»

Desde la marca anuncian un consumo que se encuentra entre los 5,2 (urbano) y 4,9 (carretera) litros/100 Km. No hemos sido capaces de conseguir igualarlos, ni siquiera acercarnos, ya que la media de consumo en nuestra prueba, alternando ambos tipos de conducción e incluyendo algún tramo revirado, se encontraba en unos 6,8L. Hay que admitir que hemos tratado de exprimir el Mini Cooper al máximo.

Una de las cosas que más llama la atención es que el motor es muy silencioso, casi no se escucha dentro del habitáculo. Esto hace que muchas veces no te percates de las revoluciones que lleva el motor y por ende te avise el panel de que es recomendable aumentar marcha. En cuanto al sonido del escape, hay que admitir que en modo sport tiene un no se qué, un que se yo que te acaba cautivando. Bueno siendo sinceros en modo sport todo suena mucho mejor.

¿Qué nos ha parecido?

Es un coche que nos ha sorprendido, muy ágil y divertido. El notar como tira el coche desde abajo que consigue hacer que te pegues al asiento cuando alcanzas las 3000 rpm, es una sensación muy divertida. El paso por curva es muy bueno, notas como el coche inclina lo justo para ayudarte a coger la mejor trazada.

Contamos con tres modos distintos de conducción. En primer lugar el Green, el modo ecológico podríamos llamar, que nos sirve para conducir de una manera más eficiente, y tratar de reducir el consumo de nuestro vehículo. El modo predefinido o Mid, es el que se usará de manera habitual. Por último, el Sport, que volverá la suspensión algo más dura al igual que el volante de nuestro Mini Cooper. Este es sin duda el modo más divertido, ya que tendremos las posibilidad de estirar algo más las marchas y el coche nos transmitirá mejor las sensaciones. Eso sí hay que tener en cuenta, que al ir más ligeros, seguramente el consumo de combustible también aumente. Pero ya sabéis lo que dice el refrán, “sarna con gusto no pica”.

Sin duda se trata de un coche muy completo, solo le ponemos una pequeña pega. No poder acceder a zonas de bajas emisiones ya que no contamos con etiqueta ECO. En el caso del Mini Cooper llevamos el distintivo C y viendo que dentro de la gama de motores de la marca podemos encontrar alguno que es completamente eléctrico (el Cooper SE), hubiese estado bien realizar algún tipo de microhibridación para conseguir la tan ansiada etiqueta ECO. Por último añadir que el precio de partida del Mini Cooper 5 puertas es de 24.450€.

No obstante es un coche que como ya hemos dicho nos ha gustado y sorprendido mucho, completo, dinámico y divertido. Manteniendo esa esencia que hizo que se volviese popular, pero que a la vez nos ofrece las últimas tecnologías para mejorar el confort, la habitabilidad y la seguridad.

Mini Cooper 5 puertas, manteniendo la esencia pero a la última en tecnología

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